Me reencuentro con el grupo a la altura del camino de Ferriol, y seguimos rumbo al Maigmo. Todo dentro de lo normal hasta que llegamos a Agost. Es aqui cuando nuevamente un compañero del grupo, en este caso Benja, nos deleita con otra de sus aficiones en el tiempo libre... "la espeleologia", y asi fue, vio la posibilidad de un descubrimiento Ibero y se adentro en una excavacion urbana de una forma un tanto brusca, la caida libre con valla y bici incluida...
Despues de este percance, seguimos para coronar El Maigmo, con el consiguiente esfuerzo. Para luego ser recompensados con una serie de bajadas divertidisimas hasta Rabosa. Es aqui donde el grupo se parte porque algunos tenian prisa, pero..... liamos a Ximo y se quedo a almorzar. Con la repercusion que esto conllevo, record de almuerzo en 33 minutos con cafe y licor incluido.
Finalmente la vuelta, con una pequeña variante muy chula desde Rincon Bello, no dejo indiferente a nadie, ya que desde Agost se hicieron una serie de minigrupos con la filosofia "ya nos veremos casi por Elche".
Nos reagrupamos en la balsa del campo de golf, cuando dijimos: ¡falta uno! ¿no puede ser? ¿donde esta Cristian? Y efectivamente, ese compañero que en las partes finales de las etapas suele gritar: "¡Vamos a adelantar a esa motocicleta! o se dice a sus adentros "Si teneis cojones me seguis", lo vimos llegar agotado, con la cabeza agachada, supongo que diciendose: "Vaya cachondeo que van a tener conmigo despues de esta". Y no se equivocaba.
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Despues de este percance, seguimos para coronar El Maigmo, con el consiguiente esfuerzo. Para luego ser recompensados con una serie de bajadas divertidisimas hasta Rabosa. Es aqui donde el grupo se parte porque algunos tenian prisa, pero..... liamos a Ximo y se quedo a almorzar. Con la repercusion que esto conllevo, record de almuerzo en 33 minutos con cafe y licor incluido.
Finalmente la vuelta, con una pequeña variante muy chula desde Rincon Bello, no dejo indiferente a nadie, ya que desde Agost se hicieron una serie de minigrupos con la filosofia "ya nos veremos casi por Elche".
Nos reagrupamos en la balsa del campo de golf, cuando dijimos: ¡falta uno! ¿no puede ser? ¿donde esta Cristian? Y efectivamente, ese compañero que en las partes finales de las etapas suele gritar: "¡Vamos a adelantar a esa motocicleta! o se dice a sus adentros "Si teneis cojones me seguis", lo vimos llegar agotado, con la cabeza agachada, supongo que diciendose: "Vaya cachondeo que van a tener conmigo despues de esta". Y no se equivocaba.
